Waffles de queso cheddar y cebollino: crujientes, sabrosos y perfectos para cualquier momento
Hay combinaciones que simplemente funcionan, y esta es una de mis favoritas de todos los tiempos. Waffles de queso cheddar y cebollino. Crujientes por fuera, tiernos por dentro, con ese sabor potente y salado del cheddar que contrasta con el toque fresco y herbáceo del cebollino. Sinceramente, son adictivos. Y lo mejor: se preparan en nada, no necesitas ingredientes raros, y se adaptan a lo que tengas por casa.
Hoy te cuento mi versión casera, con todo el sabor y sin complicaciones. Si tienes una gofrera olvidada en el armario, es hora de sacarla y encenderla. Porque estos waffles salados son puro amor crujiente.
Ingredientes para 6 waffles medianos:
Ingredientes | Cantidad |
---|---|
Harina de trigo | 200 g |
Leche entera | 200 ml |
Huevos | 2 unidades |
Queso cheddar rallado | 150 g |
Cebollino fresco picado | 2-3 cucharadas |
Mantequilla derretida | 60 g |
Polvo de hornear (levadura química) | 1 cucharadita |
Sal | 1/2 cucharadita |
Pimienta negra | Al gusto |
Paso a paso: así hago mis waffles de cheddar y cebollino
- Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, mezcla la harina, el polvo de hornear, la sal y la pimienta.
- Integra los líquidos: En otro bol, bate los huevos con la leche y la mantequilla derretida. Añade el queso cheddar rallado y el cebollino picado.
- Une todo: Vierte los ingredientes líquidos sobre los secos y mezcla justo hasta integrar. No sobrebatas.
- Calienta la gofrera: Engrasa con un poco de mantequilla o spray antiadherente y precaliéntala bien.
- Cocina los waffles: Vierte una porción de masa y cocina hasta que estén dorados y crujientes por fuera (cada gofrera es un mundo, pero unos 4-5 minutos suele bastar).
Ideas para acompañar:
- Con un huevo poché encima y unas hojas verdes.
- Con salmón ahumado y crema agria. ¡Espectaculares!
- Como base para un brunch con aguacate y tomate.
- Con un toque de miel o sirope de arce para contraste dulce-salado.
- En formato mini, como aperitivo con mermelada de cebolla o chutney.
Preguntas frecuentes:
¿Se pueden congelar? ¡Sí! Deja que se enfríen completamente, envuélvelos en film y congela. Para recalentarlos: tostadora, sartén o air fryer.
¿Puedo usar otro queso? Claro. Prueba con emmental, gouda o manchego curado. Pero el cheddar les da ese toque clásico y sabrosón.
¿Y si no tengo cebollino fresco? Puedes usar cebolla tierna muy picadita, cebollino seco o incluso perejil. Pero el frescor del cebollino hace magia aquí.
¿Se puede hacer la masa con antelación? Mejor no. La levadura pierde fuerza. Si quieres adelantar, puedes preparar los ingredientes secos y líquidos por separado y mezclarlos justo antes de cocinar.
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Por qué amo estos waffles salados
Porque son rápidos, sabrosos, versátiles. Porque puedes servirlos en un brunch elegante o en una cena informal. Porque combinan con casi todo y siempre sorprenden. Y porque el queso cheddar con cebollino es una de esas parejas que nunca fallan.
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