¿Te apetece una cena sabrosa, caliente y reconfortante, que puedas preparar todo en una sola olla? Olvida los fuegos cruzados, las sartenes múltiples y el trajín de platos sucios. Hoy comparto contigo mi receta de one pot chili mac and cheese: un abrazo en forma de comida que mezcla chili con queso y macarrones en un solo guiso. Fácil, lleno de sabor y perfecto para cuando llegas hambriento después de un día largo… o simplemente cuando buscas confort.

¿Por qué me conquistó esta receta?

Todo en una sola olla: máximo sabor y mínimo fregado.
Textura cremosa gracias al queso fundido y la pasta cocida en la salsa.
Equilibrio de sabores: la nota especiada del chili y la suavidad del queso cheddar crean una armonía perfecta.
Versátil: puedes adaptarlo si deseas una versión vegetariana, con carne picada, pavo o incluso solo vegana.
Es ideal para toda la familia: gusta a niños y adultos por igual y se prepara en menos de 40 minutos.

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Ingredientes (para 6 raciones generosas)

Ingrediente	Cantidad	Notas
Aceite de oliva	1 cucharada	Para sofreír verduras
Cebolla mediana	1 (picada finamente)	Dulzura natural
Ajo	2–3 dientes (picados)	Aroma y profundidad
Pimiento rojo o verde	1 (en dados)	Opcional pero aporta color y sabor
Carne picada (ternera o pavo)	400 g	Puedes usar versión vegetal
Tomate triturado o en dados	400 g (1 lata)	Base del chili
Caldo (pollo o verduras)	500 ml	Para cocer la pasta
Macarrones (pasta corta)	250 g (sin cocer)	Ej. de codo o caracol
Chili en polvo	1 cucharada sopera	Ajusta según gusto
Comino molido	1 cucharadita	Sabor característico
Orégano seco	½ cucharadita	Aromático
Sal y pimienta negra	Al gusto	Realza sabores
Queso cheddar rallado	200 g	Mejor si lo rallas tú
Queso mozzarella rallado	100 g	Para textura fundida
Frijoles (opcional)	1 taza (enjuagados y escurridos)	Aporta proteína y fibra
Guarnición sugerida	Cilantro fresco, jalapeños picados, crema agria, nachos triturados	Toque final

Paso a paso: Cómo preparar el chili mac and cheese en una sola olla

1. Sofríe la base

En una olla amplia, calienta el aceite. Añade cebolla, ajo y pimiento. Sofríe a fuego medio hasta que la cebolla esté translúcida y el pimiento blando. El aroma te anticipa lo bueno que viene.

2. Añade la carne y especias

Incorpora la carne picada. Cocina hasta que pierda el color rosado y se dore ligeramente. Espolvorea chili en polvo, comino, orégano, sal y pimienta. Remueve unos instantes para que se mezclen aromas.

3. Incorpora tomate, caldo y frijoles

Agrega el tomate triturado y el caldo. Si usas frijoles tipo alubias rojas o pintas, añádelos ahora. Lleva la mezcla a ebullición suave durante unos minutos.

4. Cocina la pasta dentro de la salsa

Incorpora los macarrones crudos y tapa. Reduce el fuego a medio-bajo y cocina entre 10–12 minutos, removiendo alguna vez, hasta que la pasta esté al dente y haya absorbido parte del líquido sin quedar seca.

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5. Fundido de quesos

Apaga el fuego. Mezcla rápidamente con el queso cheddar y mozzarella hasta que se fundan y formen una salsa cremosa que abraza cada macarrón.

6. Sirve y decora

Sirve caliente, añade por encima un poquito de cilantro fresco picado, jalapeños si te gusta el picante, una cucharada de crema agria o incluso nachos triturados que aportan un contraste crujiente.

Trucos y consejos que marcan la diferencia

Ralla tu propio queso: el pre-rallado suele llevar talco para que no se aglutine. El rallado casero se funde mejor.
No cocas pasta aparte: cocinarla directamente en la salsa la llena de sabor. Solo ajusta el líquido si se absorbe demasiado pronto.
Ajusta las especias al gusto: si prefieres menos picante, reduce el chili en polvo; si te gusta fuerte, añade un poco de cayena o chipotle molido.
Versiones alternativas:
- Vegetariana: solo añade más pimiento, calabacín y frijoles.
- Sin gluten: usa pasta sin gluten y caldo sin gluten.
- Más ligereza: sustituye el cheddar por queso bajo en grasa o ricotta.
Sobrantes: se guardan hasta 3 días en nevera en recipiente hermético. Recalienta con un chorro de leche para recuperar cremosidad.

Preguntas frecuentes (FAQ)

¿Qué tipo de pasta funciona mejor?
Preferiblemente pasta corta como macarrones, caracoles o penne. Al ser cortitas, se cocinan bien en salsa y se mezclan bien con el queso.

¿Puedo preparar este plato en olla a presión o Instant Pot?
Sí. Sofríe dentro de la olla, añade ingredientes y cocina en presión alta unos 6 minutos. Libera presión rápido, añade el queso y mezcla.

¿Y si no quiero carne?
Puedes sustituirla por soja texturizada o champiñones picados y salteados. El plato sigue siendo sabroso y completo.

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¿Por qué no añadir leche o nata?
La versión tradicional es más ligera y se basa en el queso derretido. Si prefieres una textura ultra cremosa, puedes añadir 100 ml de leche o nata al final al mezclar los quesos.

¿Es un plato picante?
Depende de la cantidad de chili en polvo que añadas. Mi receta está en punto medio. Ajusta según tu tolerancia al picante.

Final thoughts / ánimo del chef

Este one pot chili mac and cheese es de esos platos que abrazas con cuchara y te reconforta el alma. Es perfecto para reuniones familiares, noches de peli, o simplemente cuando necesitas algo que te llene el corazón y el estómago sin complicarte. Recuerdo hacerlo en casa durante tardes de lluvia en las que el olor se expandía por toda la cocina y llamaba a todo el mundo a la mesa.

Lo mejor es que no solo es sabroso: es práctico, rápido y adaptable. Puedes jugar con ingredientes, reducir calorías si quieres, o convertirlo en un plato veggie sin perder ni un ápice de sabor. Y la limpieza… ¡sólo una olla! Menos trabajo, más disfrute. Esa es la magia.

Te animo a que lo pruebes esta semana. Reúne todo, sigue estos pasos y observa cómo esa olla se transforma en un plato lleno de color, textura, aroma y sabor. Las cucharadas se suceden, las caras se relajan, y las manos vuelven por más. Así de sencillo y especial.

Porque al final, la cocina casera es eso: sabor compartido, recuerdos forjados y comida que te reconcilia contigo mismo. Este chili mac me lo recuerda cada vez que lo cocino. Ojalá también lo disfrutes tú con esa chispa de cariño que puso el chef que lo preparó.