Palitos de calabacín al horno crujientes | Snack saludable y fácil

Palitos de calabacín al horno: mi snack saludable favorito, crujiente por fuera y tierno por dentro
Hay días en los que tu cuerpo te pide un capricho… pero sin culpa.
Y ahí, justo ahí, es donde aparecen estos palitos de calabacín al horno, crujientes, doraditos y con ese toque casero que enamora.

No necesitas freír nada.
No necesitas complicarte.
Solo un calabacín, un horno y muchas ganas de comer algo rico y ligero.

Esta receta no solo es saludable, también es adictiva (pero en el buen sentido). Es perfecta como snack entre horas, como entrante en una cena con amigos o incluso como acompañamiento de una comida ligera.

Yo los hago cada vez que quiero algo rápido, sabroso y sin remordimientos. ¿Te apuntas?

Ingredientes para preparar palitos de calabacín al horno crujientes
Esto es lo mejor de todo: no necesitas ingredientes raros ni caros. Todo lo puedes tener ya en casa:

Para 2 personas:
2 calabacines medianos

2 huevos grandes

60 g de pan rallado (mejor si es panko)

40 g de queso parmesano rallado

1 cucharadita de ajo en polvo

1 cucharadita de orégano seco

Pimienta negra al gusto

Sal al gusto

Un chorrito de aceite de oliva virgen extra (AOVE)

Consejito: Puedes usar pan rallado integral para una versión aún más sana o sin gluten si lo necesitas.

Paso a paso: cómo hacer palitos de calabacín al horno, doraditos y sabrosos
Aquí no hay misterio. Lo importante es cortar bien, empanar con cariño y hornear con paciencia. ¡Vamos allá!

1. Cortar los calabacines
Lava los calabacines, no hace falta pelarlos.

Córtalos en bastones (como si hicieras patatas fritas).

Leer también –  Cenas fáciles de pollo en bandeja: sabrosas, rápidas y sin complicarte la vida ✨

Intenta que queden del mismo tamaño para que se cocinen de forma uniforme.

2. Preparar el rebozado saludable
En un bol, mezcla el pan rallado, el queso parmesano, el ajo en polvo, el orégano, sal y pimienta.

En otro bol, bate los huevos con una pizca de sal.

3. Empanar con amor
Pasa cada palito de calabacín primero por el huevo, y luego por la mezcla de pan rallado.

Presiona bien para que se adhiera la cobertura.

Coloca los bastones rebozados sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal.

4. Hornear hasta que estén doraditos
Precalienta el horno a 200°C.

Rocía los palitos con un poco de aceite de oliva en spray o con una brocha.

Hornea entre 20 y 25 minutos, dándoles la vuelta a mitad de cocción para que queden dorados por ambos lados.

Consejo extra: Si tienes freidora de aire, ¡úsala! Te quedan aún más crujientes y en la mitad de tiempo (unos 12-15 minutos a 190°C).

¿Cómo quedan? Te lo cuento con el corazón
Crujientes por fuera, suaves y jugosos por dentro.
El queso se dora ligeramente, el orégano les da ese aroma a cocina italiana, y el calabacín queda súper tierno.

Son tan buenos que te los comes sin darte cuenta. Uno tras otro.
Y lo mejor de todo: te quedas con el estómago feliz y el corazón tranquilo porque ¡te has cuidado sin renunciar al sabor!

Ideas para acompañarlos
Salsa de yogur con ajo y limón

Salsa marinara casera (tomate, orégano, un toque de albahaca)

Hummus cremoso

O simplemente un chorrito de limón recién exprimido… ¡brutal!

¿Por qué me encantan estos palitos de calabacín?
Porque son:

Leer también –  Anna Recetas Fáciles – Recetas De Anna Jones

Saludables sin ser aburridos

Fáciles de preparar

Económicos

Personalizables (puedes cambiar especias, el tipo de pan, hacerlo sin gluten…)

Y sobre todo: saben a hogar, a cocina de verdad, a mimo.

Consejitos reales que siempre me funcionan
Seca bien el calabacín antes de empanar. A veces suelta agua y eso hace que no se adhiera bien la cobertura.

No sobrecargues la bandeja. Déjales espacio para que se doren bien por todos lados.

El queso importa. Si usas un parmesano de calidad, el sabor sube de nivel. Mucho.

¿Y si me sobran?
Puedes guardarlos en la nevera 2-3 días, pero sinceramente… no suelen sobrar
Si los recalientas, hazlo en el horno o freidora de aire para recuperar el crujiente.

Conclusión: este snack es oro verde
Cuando quieras un bocado sabroso, rápido y que no te pese, estos palitos de calabacín al horno te salvan.
No solo son un vicio saludable, también son la excusa perfecta para cocinar con cariño y cuidarte desde el plato.

Te animo a probarlos, a darles tu toque, y a hacerlos tuyos. Porque lo bueno de cocinar es eso: convertir algo tan sencillo como un calabacín… en una delicia inolvidable.

 

View this post on Instagram

 

A post shared by @posadadelpuente2025

Ver también:

Pastel de crema napolitano sin horno | Receta fácil, cremosa y casera

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *